Te sientas en la silla frente a la webcam y entras a Chatroulette! a ver gentes raras, onanistas, exhibicionistas, feas, guapas, vestidas, desnudas…
Los primeros segundos de la conexión se hace el silencio e inmóviles os observáis. Unos segundos después una pulsación en el ratón hace saltar a otra conexión y como si de un zapping de gentes pasas a entrar a la casa de otro desconocido.
Dices: «Hello» y el desconocido te saluda con la mano mientras tu gato cruza delante de la webcam…